El 18 de octubre nos acercamos hasta el municipio vallisoletano de Tiedra para hablar con su alcalde, Nunilo Gato Pérez.
Después de 18 años al frente del Ayuntamiento, afirma que se presentó a dicho cargo por la inquietud de mejorar las condiciones que había en el pueblo, ya que, veía que se estaba anquilosando. Eso sí, ha vivido buenas y malas experiencias. Prefiere quedarse con las primeras, como haber llevado a cabo proyectos que considera muy importantes para el municipio. De las segundas, las peores son las que afectan al ámbito personal y no al público.
Aun así, la población ha sufrido un progresivo descenso, ya que, Tiedra ha perdido más de 2000 habitantes en el último siglo. Lo cual, provoca una bajada de los servicios. En la sanidad, Tiedra dispone de un consultorio al que acude el médico 3 días a la semana y la enfermera 4. En cuanto a la educación, no tienen escuelas propias y el alcalde no se plantea volver a abrirlas.
Nunilo Gato afirma que en Tiedra sí que siguen vivas las tradiciones: “La gente las vive como propias y lucha por mantenerlas”. Además, ayuda la distancia con la capital.
El alcalde asegura tajante que los medios de comunicación no dan a los pueblos la cobertura que se merecen, salvo en pocas excepciones. Piensa que hay una gran falta de interés, lo cual “es olvidarse de los orígenes”.
Dentro de sus proyectos, tiene una gran ilusión por conseguir poner una residencia de ancianos en el municipio. También tiene previsto ampliar el Aula Arqueológica, que ahora se encuentra en el edificio del Ayuntamiento. Además, en noviembre un Centro Astronómico abrirá sus puertas en Tiedra. El alcalde espera un beneficio social y económico en el sector de la hostelería. Tiene mucha fe en que va a funcionar bien, porque lo considera un proyecto novedoso en toda Castilla y León.
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