En nuestra última visita a la zona de Sanabria (Zamora), nos llamó la atención un conjunto de carteles enmarcados bajo el nombre “Cervantes en Sanabria”. Pero, ¿de qué trata esta ruta?
¿Qué es “Cervantes en Sanabria”?
Se trata de un paseo circular, de 8’26 kilómetros fáciles, sin apenas desniveles, con principio y final en la localidad sanabresa de Robleda. Esta debe su nombre a la masa forestal predominante en la zona: el robledal, concretamente el quercus pirenaica, que aparece combinado en numerosas áreas con castaños de plantación agrupados en rodales o mezclados con el robledal.
La grandeza de algunos de estos castaños podrían haber sido tomados por don Quijote como verdaderos enemigos a derrotar, ya que su apariencia es más fiera que mil molinos en cuadrilla.
¿Cómo empezar la ruta?
El paseo arranca en la carretera de Robleda hacia El Puente para tomar, a unos trescientos metros del pueblo, el primer camino que se abre por la cuneta derecha. Al conectar con la carretera que recorre el municipio, casi a la altura de la iglesia, el camino tuerce a la derecha para pasar ante la “casa del escritor”, caserón en ruinas, que necesitaría una buena restauración.
Continuando la ruta, al tomar la primera calle a la izquierda, se llega hasta la fuente y, hacia arriba, se debe tomar la avenida de la izquierda para enlazar con la pista asfaltada que comunica Cervantes con San Juan de la Cuesta.
A esta última se entra a la altura de su cementerio y por esa misma calle se desciende hacia la iglesia. Sin tomar desvíos, la travesía se transforma en un camino que discurre en un principio entre prados y longevos castaños, aunque poco después se encajona entre altos taludes.
Tras alcanzar la carretera que lleva hacia El Puente, se debe tomar hacia la derecha y abandonarla unos 400 metros más adelante por el primer camino que se abre a la izquierda, el cual conduce hasta la ermita de San Pelayo. Desde allí se atraviesa un bello paisaje adehesado de praderas y rebollares hacia Sampil.
En esta localidad hay que abandonar el asfalto por un camino que nace al lado izquierdo, antes de alcanzar la fuente del Canto, enlace que desemboca en la carretera que, casi 2 kilómetros después conduce al punto de partida.
Recomendaciones
1. Seguir en coche los carteles que guían, a través de San Juan de la Cuesta, hacia “el repetidor”. Estas son las antenas que despuntan desde el cerro de San Juan (1419 metros), un magnífico oteadero desde el que se disfruta de una de las mejores panormámicas de toda Sanabria.
2. Localizar el punto de acceso, a 500 metros de Ferreros, al Castro de Santo Toribio, habitado entre el siglo I a.C y el IV d.C. dedicado especialmente a la actividad metalúrgica.
¿Cómo surgió la idea de este itinerario?
La actividad estuvo enmarcada en un plan de trabajo más amplio de la Asociación CRYOSANABRIA, que trata de poner en valor el patrimonio natural y cultural de las comarcas de alrededor y, en este caso, de los caminos del Cervantes sanabrés, debido a que ya habían realizado actividades relacionadas con anterioridad, con muy buenos resultados y una gran aceptación y reconocimiento local.
¿Qué relación tiene Cervantes con Sanabria?
A pesar de que el nacimiento de Miguel de Cervantes se localiza en Alcalá de Henares, numerosos autores han vinculado al novelista con la comarca sanabresa. La fecha de su nacimiento o su forma de escribir son algunos de los argumentos que utilizan estos teóricos para respaldar sus tesis.
Sean ciertas o no estas suposiciones, lo cierto es que la ruta que se ha creado de Cervantes alrededor la región zamorana merece la pena. Un paseo sencillo, sin muchas dificultades y que demuestra la gran belleza de la zona de Sanabria.
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