Situado en un pequeño alto, este pequeño municipio vallisoletano forma parte de la Tierra de Pinares.
1. Su iglesia es un modesto edificio del s.XVIII. La cúpula va decorada con yeserías policromadas que representan los cuatro Evangelios.
2. De su entramado urbano merece ser destacado la Iglesia de San Pedro Apóstol, edificio de ladrillo con una torre.
3. Es un lugar tranquilo, sosegado, con calles y paisajes que invitan al descanso y a vivir la naturaleza de una forma plena.
4. Las fiestas de San Isidro, el 15 de mayo y las de Nuestra Señora del Rosario, los días 2 y 3 de julio, reviven la localidad con juegos y verbenas.
5. La tranquilidad que ofrece el municipio permite disfrutar de deportes como el tiro al arco o la equitación.