Bienvenidos a la tranquilidad de la naturaleza, a la armonía de la vida rural… Bienvenidos a Matilla de los Caños. Cercano a la villa de Tordesillas, al borde de los Montes Torozos y a la campiña del río Duero; Matilla disfruta de unas vistas envidiables que junto al silencio que desprende, hacen de este pueblo el mejor lugar para desconectar de todos los problemas que nos persiguen día a día.
Y qué mejor lugar para desconectar que la casa rural de la que dispone el pueblo, en la que además de descansar, puedes disfrutar de su humilde historia y patrimonio. La Iglesia de Santa Eulalia, del siglo XVI, realizada toda ella, incluida su torre en piedra, se encuentra a las afueras del casco urbano. Por esa circunstancia los vecinos no se percataron en los años 80 de un incendio que asoló a su iglesia y que hizo que esta perdiera su valioso patrimonio. En el centro de vida del pueblo, sus gentes se reúnen en las bancadas a hablar de sus vidas y cotilleos, mientras sus hijos juegan en el parque.
El pueblo también es conocido por el aeródromo que se sitúa en el municipio. Tiene una pista de unos 2 kilómetros de largo. Además las instalaciones cuentan con una de las flotas más importantes de helicópteros, dedicados principalmente a luchar contra incendios forestales.
Los campos verdes y floridos por las últimas lluvias y sus fiestas. Sus torcidas calles rodeadas de casas en su mayoría de adobe y los cacareos de las gallinas. Y los relinchos de los caballos, el ruido de los tractores, de los pájaros o de los caños hacen del lugar una auténtico encanto. Por esto y por mucho más merece la pena pisar su suelo y respirar su aire.