Este municipio de Tierra de Campos se encuentra a 64 kilómetros de Valladolid, en la carretera que une Medina de Rioseco y Villalón. Posee dos monumentos que están declarados Bien de Interés Cultural y le que le convierten en un pueblo de gran atractivo turístico y un perfecto ejemplo de las maravillas que puede ofrecer la humilde Tierra de Campos.
El origen de su nombre tiene dos explicaciones. Por un lado, aseguran que proviene de los vacceos, ‘Cancia”, pero también hay quien dice que le viene por estar situado en una pequeña hondonada.
En épocas pasadas llegó a tener hasta cinco iglesias (San Mamés, San Juan Bautista, San Pedro, y las todavía en pie de Santa María del Castillo y la de San Justo y Pastor) y tres ermitas (San Martín, Santa Bárbara y la de San Bernardino de Siena, esta última aún conservada).
En la Plaza Mayor se encuentra el ayuntamiento, un edificio del siglo XVII, con una magnífica entrada con arcos. Del más grande se dice que era la entrada natural de los carruajes de principios del siglo XVI.
De la Iglesia de San Justo y Pastor, mudéjar del siglo XVI, destaca el interior. Cuenta con un artesonado de madera cubre la iglesia, En referencia a los retablos, el del altar mayor edificado a los santos patrones obra de Pedro Bolduque (siglo XVI); el de la izquierda es barroco del siglo XVIII y el de la derecha es neoclásico del mismo siglo. Se ha instalado en su interior el Museo de Arte Sacro que muestra las obras del escultor Alejo de Bahía.
La otra iglesia es la de Santa María del Castillo. Es una construcción del siglo XIV en estilo gótico-mudéjar. Debido a un incendio que sucedió hace más de un siglo, pasó a manos privadas y fue restaurada.
El Monasterio de las Claras de San Bernardino de Siena es del siglo XV, aunque posee partes de épocas anteriores. Realizado en estilos gótico, renacentista y mudéjar, perteneció al primer condestable de Castilla, Pedro Fernández de Velasco.
Además, situado en un pequeño cerro, se alza la Torre del “Conjuradero” donde se dice que en tiempos medievales conjuraban las tormentas y mandaban las nubes a otras comarcas con el fin de salvar sus cosechas. A un kilómetro del municipio, se encuentra la Ermita de San Bernardino de Siena, de estilo mudéjar del siglo XV, con cuadros con leyendas y milagros en torno a la ermita.
Cómo llegar a Cuenca de Campos