Incorrecto es decir que vimos todo lo que alberga un pueblo como es Tordesillas, imposible es decir que no nos impresionamos con la visita y difícil es explicar todo lo que sentimos al estar allí. Uno de los pueblos con más historia de la provincia vallisoletana, uno de los pueblos con más patrimonio y tradiciones… Tordesillas.
Nada más llegar, pudimos contemplar el puente que pasa por encima del Duero. Un impresionante puente medieval, paso obligado para sacar una buena foto y así observar el transcurrir del caudaloso río Duero por los ojos del puente.
A un margen del Duero, en lo alto, se encuentra el Real Monasterio de Santa Clara, una de las maravillas del pueblo y de la provincia asentado sobre un antiguo palacio mudéjar. Este a su vez, se edificó sobre otro mudéjar; construyendo un conjunto artístico que se puede comparar con una “minialhambra”.
La localidad cuenta con varios museos, uno de los más importantes, el Museo del Tratado. Entre sus muros se muestra la historia del pueblo, de España y del mundo. ¿Por qué? Tordesillas fue sede de uno de los tratados más importantes de la humanidad, que dividió América del Sur como hoy la conocemos y que dio origen a la creación de países como Brasil. Este museo muestra además, la historia del descubrimiento de América y contiene muestras de utensilios que utilizaban los indígenas, como collares o pulseras. En Tordesillas también se puede disfrutar de museos como el del arte sacro, museo del encaje y el museo de la radio.
Un turista solo ve lo que observan sus ojos pero existe mucho patrimonio desaparecido que por lo menos hoy, en nuestra web, queremos mencionar. Una de las edificaciones más importantes de Tordesillas, fue su Palacio Real, sede de las Cortes Itinerantes de Castilla y lugar donde estuvo buena parte de su vida la reina Juana I de Castilla.
Tordesillas es un lugar que cuenta mucho y necesita de unos ojos y unos oídos para demostrar que la historia aún existe en el presente.